lunes, octubre 12, 2009

LOS TRES CABALLEROS

CUANDO TRABAJABAN JUNTOS LOS SINALOENSES

El grupo delictivo conocido como “Los Tres Caballeros”, es apoyado en sus operaciones por una familia ya conocida en el ámbito del narcotráfico en Sonora: Los Enríquez.

Originarios de San Bernardo, Municipio de Álamos, en Sonora, pero con su centro de operaciones en Navojoa, “Los Güeritos” son socios de los hermanos Beltrán.

De acuerdo a investigaciones del Gobierno federal, Raúl Enríquez Parra, apodado “El Siete” es compadre de José Alfredo “El Mochomo” Beltrán.

A ambos se les identifica como operadores de Joaquín “El Chapo” Guzmán Loera y mantienen vínculos con personajes del crimen organizado en Sonora, Chihuahua y Sinaloa.

Raúl Enríquez, líder de la banda conformada en su mayoría por sus familiares conocidos también como “Los Números”, está señalado de participar en por lo menos 70 ejecuciones cometidas en Sonora durante el 2004.

Esto, tras la disputa del territorio con el narcotraficante Adán Salazar Zamorano, conocido como “Don Adán”.

“El Mochomo” es el encargado de captar a diferentes corporaciones policiacas, en su mayoría de Culiacán, Sinaloa, con la finalidad de proporcionar seguridad a la organización delictiva que integra.

Identifican a “Los Tres Caballeros”

Para el Gobierno federal, José Alfredo, Marco Arturo y/o Alberto, y Carlos Beltrán Leyva, son identificados como “Los Tres Caballeros” y nacieron en el Estado de Sinaloa.

Aunque los tres radican en Culiacán, sólo a Carlos Beltrán Leyva se le identificó en un domicilio registrado como de su propiedad, ubicado por la calle Lerdo de Tejada, número 130, de la colonia Ejidal de la capital sinaloense.

Además es dueño de una avioneta Cessna, modelo TU206G, serie 6573, registrada en la Dirección General de Aeronáutica Civil de la Secretaría de Comunicaciones y Transportes (SCT).

Los jefes de jefes

La Procuraduría General de la República, la Secretaría de Gobernación, el Ejército mexicano y la DEA, identifican a Ismael Zambada García “El Mayo Zambada”, Joaquín Guzmán Loera “El Chapo Guzmán”, a Vicente Carrillo Fuentes y los hermanos Caro Quintero, como los capos que tienen el control del corredor Sonora-Arizona.

Ellos, después de la muerte de “El Chipilón” desplazaron a los Arellano Félix de su influencia en la región.

Pero los “barones de la droga” pocas veces se meten directamente en la operatividad de estas estructuras, para ello cuentan con otras redes locales dirigidos por capos menores, pero igualmente o más peligrosos que los grandes “señores”.

Entre los principales cabecillas están los llamados “Los Tres Caballeros”,.

Estas personas tienen dos pistas de aterrizaje en las calles 5 de Febrero y 600, donde en noviembre del 2004 el Ejército mexicano estuvo de guardia por varios días al tener conocimiento del aterrizaje de avionetas cargadas con droga.

Otro de los grupos identificados es el formado por la familia Salazar Ramírez, que la encabeza Adán Salazar Zamorano, además de Juan Diego Espinoza Ramírez “El Tigre” y su esposa Sandra Ávila Beltrán “La Reina del Pacífico”.

Jesús Enríquez Salazar Villa y Salomón Benítez “El Licenciado”, son los personajes que las autoridades identifican como los operadores de los grandes cárteles de la droga en el corredor Sonora-Arizona.

Supuestamente los Beltrán Leyva incursionan en el mundo del narcotráfico al lado de Amado Carrillo Fuentes “El Señor de los Cielos”, pero a su muerte se aliaron con “El Chapo Guzmán” y Héctor Luis Palma Salazar “El Güero Palma”, quienes tenían ya controlado el tráfico por Sonora.

Los señores de los cielos

De acuerdo a las investigaciones de las autoridades federales proporcionadas a EL IMPARCIAL, tienen identificados en especial a tres bandas, las de los Beltrán Leyva, los Enríquez Parra, y los Salazar, como las más numerosas y peligrosas.

Solamente en el 2004 se les atribuye la posible participación de al menos 100 de las ejecuciones ocurridas ése año.

Para las autoridades, los Beltrán Leyva y los Enríquez Parra, mejor conocidos como “Los Números” o “Los Güeritos”, serían los que controlan mayormente el traslado de drogas, pues se han especializado en transportar en avionetas grandes cantidades de enervantes.

Presuntamente la siembra o compra de la droga la realizan en el “Cuadrilátero del Diablo”, como es conocida la sierra de Sonora, Chihuahua, Sinaloa y Durango, por donde la transportan hasta las pistas de la sierra de Tesopaco, Quiriego, Tepoca o del Valle del Yaqui.

La operación prosigue por tierra o es transferida a otras avionetas en por lo menos tres pistas del Valle del Yaqui, para llevarla a otros lugares del Estado o la frontera, de donde la cruzan a los Estados Unidos o se envía a Baja California.

Ubicados por el Ejército

En noviembre del 2004, el Ejército mexicano ubicó tres de las pistas de aterrizaje de los Beltrán Leyva en el Valle del Yaqui, dos de ellas por la calle 600 y 5 de Febrero, mientras que otra más fue localizada cerca del poblado de Hornos.

De la vigilancia de los militares se ha logrado asegurar dos avionetas, una en el Valle del Yaqui y otra en Hornos, en ésta última se detuvo a los dos pilotos y aseguraron más de 400 kilos de mariguana.

Las pistas de la calle 600 y 5 de Febrero estuvieron vigiladas por los militares, quienes tenían detectados que desde la medianoche a las 4:00 horas era cuando se registraban los aterrizajes de avionetas.

Testigos confirmaron la versión de que fueron bastantes “los aviones grandes” que se escuchaban y veían aterrizar durante la madrugada.

La “avionetita”

Incluso la “avionetita” que presuntamente escapó de la PGR el 7 de diciembre, es atribuida como propiedad de los “Güeritos”, quienes presuntamente tienen otras propiedades donde pudo esconderse la aeronave.

Entre los lugares que las autoridades federales tienen identificadas están el rancho Santa Matilde, en Guasapares, Chinipas, Chihuahua, cuyo propietario es presuntamente Santiago Aragón Álvarez.

Otro lugar sería el rancho “Burapaco” y “Burapaquito”, en Álamos, Sonora, otro probable sitio del aterrizaje fue Güicorichi, Chinipas, Chihuahua, el cual es operado supuestamente por Pedro Gutiérrez, donde identifican una pista desde donde sale por lo menos una avioneta por día.

Jecopaco de los Flores es otro lugar señalado por las autoridades y presuntamente es operado por Ray Flores, el cual se ubica en el río de San Bernardo, al pie de la sierra.

Supuestamente también operan en los alrededores del poblado de Tesia.

Fue precisamente en la región de San Bernardo, el 22 de noviembre del 2004 cuando el Ejército le propinó el mayor golpe a la banda de “Los Números”, al asegurar siete toneladas de mariguana.

Además de incautar más de dos millones de pesos en efectivo y detener a tres personas que realizaban la compraventa de la droga.

FUENTE: ELIMPARCIAL.COM


EKIPO NORTEÑO-LOS 3 CABALLEROS

0 comentarios:

Publicar un comentario

Related Posts with Thumbnails
 

© 2009NARCOTRAFICO | by TNB